Tanto desde los comentarios al artículo de ayer en este Blog, como por parte de dos medios de comunicación, nos demuestran que los datos que suministramos ayer, lejos de ser incorrectos, son incompletos. Lógicamente, el Gobierno Vasco no va a incluir los gastos de la Diputación Foral de Bizkaia, ni los de la de Gipuzkoa. Tampoco los de los de Miren Arzalluz y su predecesor, Juan Ignacio Vidarte. Eso, en su caso, corresponderá justificarlo, si alguien lo solicita, antes dos Juntas Generales y ante el Patronato del Guggenheim.
Debemos aclarar que habíamos utilizado (y dado por buenos) los datos oficiales de Lehendakaritza como respuesta a preguntas de la Oposición. En efecto, nos hemos quedado cortos. Ciertamente, nos llamó la atención sobre la no inclusión en el listado de la Vicelehendakari, Ibone Bengoetxea. Por eso entrecomillamos la respuesta literal de Lehendakaritza.
Pero si es del todo cierto que la factura presentada estaba incompleta ya que, además de Bengoetxea, también viajaron otras personas adscritas al Gobierno Vasco. Así, no incluyeron en el listado a la directora de Emakunde, Miren Elgarresta, que no sabemos exactamente a qué fue a Estados Unidos una señora que ha llegado a posar bajando unas escaleras en plan Norma Duval. Tampoco figuraba en el listado el consejero Pérez Iglesias con su viceconsejero Morais, y algunos más.
Cada vez “huele” más a un viaje de turismo: ¿Qué ha obtenido de la visita el Departamento de Ciencia, Universidades e Investigación? ¿Qué acuerdos con la Administración Trump ha traído debajo del brazo Emakunde? Lo realmente curioso es que a ese viaje no haya ido ningún responsable de Industria o de Comercio ¿Raro, no?
Y cada vez existen más datos para poder afirmar que este viaje ha sido un escándalo y nos da una foto exacta de lo que es Imanol Pradales. Una vergüenza de viaje (y de una oposición que traga con todo).
Como perfectamente matiza El.Diario.eus, se trata de un viaje que el Gobierno Vasco contrató a la agencia de viajes Byblos Tours para gestionar el desplazamiento de cinco días y catorce eventos, que ha sido el primer gran viaje oficial de Pradales desde que llegó a Ajuria Enea en 2024 aunque ha realizado otras expediciones más cortas a Bruselas, a Madrid o a Barcelona, por ejemplo. Los hitos más relevantes fueron las reuniones con la fundación Solomon R. Guggenheim o la visita a IBM.
Byblos Tours ha girado una factura de 121.116 euros. La partida más importante son los 49.117 euros en billetes de avión. Fueron 37 en total. Doce personas partieron de Bilbao a Washigton D.C. vía Múnich y consta una decimotercera persona en el viaje interno, presumiblemente el delegado del Gobierno Vasco en Estados Unidos, Unai Tellería, que aparece en la lista de acompañantes pero que ya reside allí habitualmente. En la vuelta, de nuevo, se ocuparon doce plazas. El coste por persona es de 3.778,23 euros, aunque es una media irreal porque dos personas viajaron en 'business' y el resto no.
En alojamiento se gastaron 24.875 euros. Se reservaron doce habitaciones en Nueva York y trece en la capital estadounidense. Fueron en sendos hoteles de cuatro estrellas. La media por persona es de 1.913,46 euros. Hubo también 37.147 euros para “servicios de transporte y asistencia privada con vehículos privados con conductores durante las estancias”. Los alquileres de “espacios de trabajo privados para reuniones y eventos, con personal de asistencia” supusieron 8.612 euros y los seguros de viaje con “amplia cobertura” añadieron otros 1.365 euros, poco más de 100 por persona. A esto se le añaden otros 4.827,45 euros por “desayunos, comidas y cena” al margen de la factura de la agencia de viajes.
Gastos estratosféricos sin resultados. A nivel puramente político, dar solo los datos imputables a Lehendakaritza y obviar todos los demás es un fraude.
Pero vayamos en serio: Si hubiesen sido un poco más listos deberían haberse ido a Las Vegas, porque, como todo el mundo sabe, “Lo que pasa en Las Vegas se queda en Las Vegas”.
Yo ya no sé si somos "Mundialak" como dice el EBB, o "Globalak" como dice el Gobierno de Pradales Gil. Serán cosas de mi limitada capacidad comprensiva... o cosas de la famosa bicefalia. A saber... Lo cierto es que me he debido perder. De nuevo.
Sea como fuere, a mi me sigue sonando a una auténtica tomadura de pelo en toda regla que no tengo ni idea sobre cómo coño se la van a contar al electorado ¿Con dibujitos?