He visto cómo la empresa de cosméticos Avon
cierra. La dura competencia ha hecho que una marca, con la mejor publicidad y
el mejor lema de campaña en décadas, tenga que echar la persiana. Algo que
parecía imposible. En aquella TVE, en blanco y negro, aparecía una señorita que
llamaba a tu puerta y te ofrecía los productos AVON. Eso era un buen trabajo: Ir
donde estaba el cliente, algo que hacía el PNV con los ciudadanos antes de que
llegaran los Barandiaranes de Ataun a hacer encuestas en las cuales tenías tú
que ir donde él, te metía una sonora chapa, le ponía el rimbombante nombre de
"Escucha Activa".
¡Y zas! Se obtenía la mitad de votos
que cuando AVON-PNV llamaba a tu puerta y trabajaba contigo. Tiene su lógica. Un
señor que fracasa en su pueblo (seguramente porque le conocen) y trata de
vendernos calefacciones en el Desierto de El Gobi, o congeladores en el Polo
Norte, tiene la misma credibilidad que Woody Allen hablando de la familia.
Es como aquella otra publicidad de gaseosa Casera que te decía que, si no había Casera, te ibas. Habrá que darle la vuelta y decir que, si en el PNV no hay democracia, me voy. Yo solo espero que la justicia ordinaria me haga, a su vez, justicia ante el paripé los Tribunales internos para seguir señalando todo lo malo que veo y que, lamentablemente, son pocos los que se atreven a contarlo.
Y es que solo hace falta abrir
los ojos: En Japón la noticia es que el primer ministro de este país serio,
Fumio Kishida, ha anunciado que dimitirá de su cargo al frente de su partido y
del Ejecutivo con vistas a promover "un cambio" y "una
renovación" en la formación gobernante.
Y es que eso se hace en
democracia. En Euskadi tras tres mandatos consecutivos al frente del EBB, el
clan Ortuzar-Atutxa pretenden seguir mal dirigiendo el PNV con la excusa de que
los cambios hay que hacerlos con cuidado y que ellos garantizan la estabilidad.
No hicieron lo mismo nada menos con la importantísima personalidad de Xabier
Arzalluz al que trataron como un deshecho y le faltaron al respeto de manera
impropia, pero lo hicieron. Y eso que, entonces, lo viví como una corrida de
toros desde la barrera. A eso se le llama matar al padre y lo hicieron sin
anestesia. Ahora ellos no quieren beber el mismo purgante, aunque todo indica
que, si siguen al frente el PNV, este se va a convertir en un partido de Segunda
División. De momento se han ido de vacaciones y todo lo que ocurre alrededor
les importa un huevo y la yema del otro, es decir, lo siguiente a nada.
Ejemplos:
Javier de Andrés, del PP, ha
salido hablando del Concierto y del Cupo, incluso defendiéndolo, y llamando la
atención sobre el daño que nos puede hacer Sánchez en su negociación con ERC. Ante
eso pregunté por el presidente del EBB y me dijeron que seguía en Sancti Petri
tan ricamente.
Oscar Puente, el ministro de Transportes
ha dicho que el juez Llarena se extralimita en sus funciones no aplicando la
ley de Amnistía. Pero Ortuzar sigue en Sancti Petri mirando un carrito del
helado con la bandera española al viento, exactamente, delante de sus narices.
A Pablo González, que nos lo han
vendido como un mártir de la democracia a pesar de que Putin lo canjeara y
recibiera con honores de héroe en el aeropuerto de Moscú. La Fiscalía polaca le
acusaba de espía. Ortuzar sigue en la playita tostándose al sol. No dice nada,
no vaya a ser que se molesten los de la Izquierda Abertzale.
Tanto la ONU, la mismísima Fundación Carter, como terceros observadores internacionales nos dicen que los resultados electorales en Venezuela son un fraude. Menos mal que el senador jeltzale Luke Uribe-Etxebarria ha denunciado la chapuza en el Senado, dejando en evidencia y desmintiendo la indolencia de Aitor Esteban, que debe estar revisando sus corralizas en Soria y que, al parecer, el asunto no va con él mientras aquel país arde y en Euskadi hay continuas manifestaciones a las que no van.
Por cierto, hay una este sábado (día 17) a
la que yo asistiré, pero entiendo que es más importante ir a inaugurar la txosna
de Gogorregi, preparar los litros de kalimotxo, o irse a “tardear” al
Euskalduna a que, como VIP's que son, les acomode Iturrate en su multicolor barra
gigante. Lo demostrarán las fotos de rigor. Aunque suene a coña, lo llego a entender.
Reconozco que cuando la izquierda
extrema que antes se llamaba abertzale denominaba al PNV el “partido de los
negocios vascos”, me indignaba. Los consideraba unos caraduras rojillos
burgueses viendo la paja en el ojo ajeno, pero ¿Quién iba a pensar años después
que los burukides de las ejecutivas del PNV no iban a brillar por la ejemplaridad,
sino que iban a tomar las riendas de todo tipo de negocios y adjudicaciones
públicas? Un inocente dato: La hermana de Itxaso Atutxa, Amaia, trabaja en una
constructora y es miembro de la Comisión (interna) de Garantías y Control ¡Bingo!
Lamentable, pero muy cierto. ¿No puede trabajar en una constructora? Por
supuesto que sí, pero, si tienes a tu marido de jefazo del Metro y tú, además, controlas
todo desde la Comisión de Garantías y Control, la cosa huele. Como diría su
cuñado, Aitor Esteban, refiriéndose a Begoña Gómez, legal será, pero muy
estético no es.
Han abandonado las riendas de la
organización y del trabajo, han cerrado batzokis y desmovilizado a la afiliación.
La formación de nuevos alderdikides ha sido anulada, así como las charlas en
los batzokis. Los nombramientos de altos cargos brillan por su mediocridad al
imponer personas de ciega obediencia o familiaridad. La gestión del vil metal y
la dolce vita parece haberles abducido.
Pero seguimos de vacaciones y
ralentizando el proceso, a ver si los ánimos cambiantes se calman. No van a
engatusar ya más al personal. Saben como nadie que esto solo se resuelve
yéndose a sus casas y, cuanto antes, mejor. Y repito, el malo no soy yo por
contar estas cosas, sino la impunidad con la que han actuado y pretenden seguir
actuando, así como su absoluta soberbia e incompetencia.
Estos días se habla de los
incendios en Grecia. Tremendos, pero hubo un incendio político del que por aquí
no se quiere hablar como ocurrió hace poco con Convergència y Unió de Catalunya (Ci), o con el histórico Movimiento
Socialista Panhelénico, más conocido como el PASOC que, después de gobernar y
condicionar Grecia durante décadas, en enero de 2015 quedó en la última
posición con apenas un 4,7% de los votos. Algo que tranquilamente le puede
ocurrir al PNV como le ocurrió a CiU si el PNV, desde abajo, no echa a los
mercaderes del templo.
Si AVON ya no llama a tu puerta, el PNV cierra Batzokis, y Ortuzar se sigue dorando al sol, lo del PASOC, lo de CiU, o lo del PSF francés parecerá una anécdota ante lo que le puede ocurrir al histórico partido de mis amores.
No será por que no me harte a reseñarlo y avisarlo.