EL EBB DE ORTUZAR DEJÓ SOLO A URKULLU Y PERMITIÓ QUE ELA Y LAB SE CARGARAN A DARPÓN

 

Iñaki González fue director de DEIA. Pasó algo raro y dejó de serlo. Estuvo en la jefatura “digital” del Grupo Noticias  sin saber nadie que hacía y ahora ha vuelto como Director. En él se cumple eso de que segundas partes nunca fueron buenas. En el interine ha estado en su puesto una señora del todo incompetente, Marta Martín, que ahora ha sido ascendida mediante un  enchufe de los que debería poner rojo a cualquier enchufador, ascendida a los cielos de la Administración vasca para ir  repartiendo subvenciones que pagamos todas y todos. Como todas y todas hemos pasado de la noche a la mañana a pagar la nómina de semejante cero a la izquierda.

Yo creía que, cuando uno tiene la vocación de médico, periodista, albañil, o abogado le gusta ser médico, periodista, albañil o abogado pero, al parecer, a esta señora lo que le gusta es ser cargo de confianza de quien ella se ha ganado la confianza. Pero ha demostrado no ser periodista (algo que, por cierto, se lleva en el ADN). Esta señora, con ese paso a los cielos administrativos, nos demuestra el ojo clínico basuril de quien la eligió para ser directora de DEIA, es decir Juan José Baños, el hombre que juega a pala con Ortuzar y luego come percebes con él. Y, seguramente, la eligió para hundir el Medio porque de otra manera no puede entenderse semejante decisión tan ruinosa como nefasta, cutre y aparatera.  

¿Alguien dará alguna explicación? NO:  La impunidad es lo que les guía. y les gusta por el momento. Porque ese momento no va a ser eterno y a fecha actual, todo el mundo tiene más que cazados a todas y todos esos omasos agradecidos.

 

DEIA, UNA ESQUELA, GARA TRES, EL CORREO ESPAÑOL DOCE. 

Digo esto porque así se explica la irrelevancia de DEIA, un periódico que nació tras una dictadura para hacer lo contrario a lo que hacía el usurpador de rotativas, El Correo Español y, de rebote, la Gaceta del Norte. Y por qué y para lo que se creó que, fundamentalmente, fue para  que debiera ser un periódico de combate y no en lo que se ha convertido: Una mala escopeta de feria. 

Hoy tenía una sola esquela y pagada por un Ayuntamiento, GARA tres y El Correo Español, doce. Ahí está la diferencia como diría Cantinflas. Si el director González Torre fuera listo pondría las esquelas gratis para fidelizar a los lectores, y le pondría a Iban Gorriti los domingos de forma destacada porque, con sus temas históricos,  es el hecho diferencial de este periódico. Pero no… Lo meten los lunes en las páginas escoba como de tapadillo. 

Y pongo otro ejemplo de ayer, viernes: Este fue el gran titular de  portada. ”Osakidetza sumará 358 profesionales sanitarios más en la Atención Primaria”. Muy bien. Pero ¿este titular es para la portada y a cinco columnas?. Pues NO. El titular de un periódico abertzale de combate debería haber sido: “Darpón rehabilitado por la Judicatura y sus acusadores callados”. Y, debajo, las declaraciones del Lehendakari Iñigo Urkullu pidiendo explicaciones. Esto debería ser la tónica de un periódico promovido por el PNV pero, al parecer, es como pedir angulas a treinta euros el kilo. Imposible. 

Ya lo hizo esta semana con la muerte de Mario Fernández: Un huequito abajo en portada (mil veces mejor lo hicieron Gara y El Correo Español) y  que apenas se veía mientras que el pasado domingo rendían honores de general de cinco estrellas al bachiller Ansola, como si semejante ágrafo y mediocre fuera el descubridor de la penicilina. O el negarse a entrevistar a Urtaran y a Salinas-Armendariz, tan afiliados como Berriozabal y el citado Ansola, pero sin ningún derecho. 

Y es que donde no hay mata no hay patata. Mientras el periódico languidece, Baños sigue comiendo percebes e Iñaki  González y Miriam Vázquez siguen flotando en una cálida mediocridad encantados de haberse conocido y llevando el barco al acantilado.

Vamos a ver: ¿En serio no hay nadie en Sabin Etxea que pueda poner coto a este despeñadero?. Desde luego no Unai Larrea, jefe de Prensa del PNV, anterior gacetillero de deportes, y pececillo del mismo Aquarium… Otro de los artífices de que lo de los candidatos del txoko de Zeberio a la Presidencia del Athletic Club perdiesen sistemáticamente las elecciones o, lo que es lo mismo, que quiénes disponían -a la vez- de carnet de EAJ-PNV y del Athletic les mandasen al guano. La primera vez, cuando ganó Aitor Elizegi, por un puñado de votos (ya sé que eso jode más), por lo que estuvieron poniendo a parir en DEIA al que llamaban “el cocinero” desde el minuto uno tras ser elegido máximo rector del Club. Luego, ocurrió tres cuartos de lo mismo cuando Jon Uriarte les pasó como una apisonadora por todas y cada una de las mesas Electorales del Club que, por cierto, lo son por edad.

Unas y unos cuántos Socios-Compromisarios del Club (y muchos dotados de nuestra condición de accionistas de EISA) y entonces, a su vez, de carnet de EAJ-PNV, tuvimos que remitir una queja por escrito al anterior/nuevo Director de DEIA para expresar nuestra rotunda queja sobre aquella cutre política de acoso y derribo encargada a un cutre gacetillero (Disponemos de la carta y de la contestación de González Torre).

Y qué decir cuando no tiraron la cuchara y les dio por presentar a Ricardo Barkala (tercer plato tras la negativa de otros dos) y el sopapo electoral que aún retumba en los cristales de mi casa, frente a San Mamés. Y miren que Barkala no es un tipo que me caiga mal pero, pasado el tiempo, sigo sin entender cómo alguien con la cabeza tan bien amueblada pudo prestarse a hacerse el harakiri por el capricho de Itxaso Atutxa y el de su vecino de chalet, a saber, el "mudito" Josu Urrutia (o uno que se ha comido a Urrutia). El gráfico es un poema pero, ni el 85% de las y los socios se quedaron en casa, y como una Institución con unos Estatutos adaptados la siglo XXI, se tiene en cuenta tanto lo del voto telemático como eso de un socio/a = un voto. A los del txoko de Arratia no les gustaba para el Athletic Club, pero tampoco para la sigla política en la que aún se creen referentes.

Si a mí me dejaran reflotar DEIA, lo hago en una semana. Saco entrevistas con punta de Urtaran y de Salinas, pongo a parir a los que obligaron a dimitir  a Darpón (sobre todo a los dirigentes de ELA y LAB), me conduelo por el fallecimiento de la madre de Joseba Egibar y cuento su vida, hago un reportaje sobre los Batzokis cerrados y el por qué la gente no acude a ellos, le saco a Bergara, Ansotegi y Belén Greaves un análisis sobre el sistema electoral interno del PNV, hago un seguimiento preciso de lo que opinan los vascos estadounidenses ante la victoria de Trump, doy cuenta de la votación ayer en el Congreso pidiendo que la Corte de la Haya persiga a Maduro (porque DEIA no ha dicho absolutamente nada a pesar de que salió gracias al voto del PNV), le pregunto a Revilla por la cumbre de Santander, publico un reportaje sobre cómo se celebraban antes las Navidades y la importancia de la reunión familiar, y cosas así. Y seguro que me compraban DEIA hasta los gatos. 

Pero con esta dirección no hay nada que hacer pese a que es infinitamente más profesional que la de su incompetente predecesora. Perder la oportunidad de reivindicar al que fuera consejero de sanidad (ahora Salud), Jon Darpón, y dar una noticia técnica, nos demuestra que no es el director que requiere el PNV para DEIA en este momento. Por no publicar, ni este este viernes ha informado debidamente sobre el funeral del que fuera vicelehendakri Mario Fernández, lo contrario que ha hecho El Correo Español. Que no, que DEIA se va por el sumidero con esta cuadrilla de Ortuzar y sus expendedores de subvenciones. 

De perdidos al río... "From lost to the river", pero el agua está muy fría así que ná de ná.

En resumen, los muertos, la mayoría del PNV pero a los efectos de las esquelas, en El Correo Español. Digo yo que por algo será, ¿No?