UNA SUBVENCIONADA SUBVENCIONADORA DE SUBVENCIONES

Sí, suena a trabalenguas pero se vamos a hacer que se entienda perfectamente. Cuando Marta Martín hacía que dirigía Deia, prescindía de colaboradores por (según dijo de forma borde y escueta) “faltar al respeto” a una reconocida fascista de la extrema derecha española. Es decir, mientras no diga lo contrario (como nunca lo ha dicho) damos por bueno que blanqueaba a la extrema derecha española. Si no es cierto, que respire.

A esta señora solo me la he cruzado un par de veces (en sendas Juntas de Accionistas de EISA) y en ninguna de ellas ha dado la cara y ha optado por salir por patas y a la carrera (estaba “muy ocupada”, la justificaban). Algo del todo normal cuando una enchufada de manual sabe que  tiene el rabo de paja y, también, sabe que alguien (como quién escribe estas líneas) se lo puede decir directamente a la cara, sin el menor miramiento, y sin anestesia.

Poco ha tardado en saltar la polémica por su urgente y chapucero nombramiento como cargo público (de los de  80.000 napos al año). El responsable de su nombramiento es directamente el Lehendakari Pradales al que -supongo- alguien le habría indicado la idoneidad de semejante “fichaje e invierno”. Ciertamente, peor no se pueden hacer las cosas y, como casi siempre, el tiempo pone a cada cual en su lugar, como es el caso de Marta Martín.

Y resulta que EH-Bildu ha andado bien de reflejos y no ha tardado en denunciar la incompatibilidad consistente en que la exdirectora de Deia pueda dirigir el reparto de la publicidad institucional del Gobierno vasco. En efecto, la iniciativa de EH-Bildu la coloca en el foco y mañana (hoy) la consejera-portavoz tendrá que tragarse el sapo. Había puestos más “tapaditos”, claro que sí, pero la suficiencia hace que presenciemos este tipo de recurrentes dislates. También supongo que es mucho más cómodo acercarse a Vitoria-Gasteiz desde Mendoza que ir a otra oficina a 45 minutos y que, como siempre, los favores se pagan. Lo que no sabemos a qué favor o favores se debe ese repentino paso a lo público de Marta Martín.

Así, el dato objetivo es que el Lehendakari (que en última Instancia firma el BOPV) encomendó a la exdirectora de Deia el reparto de la publicidad institucional y, como hemos dicho, en su legítima labor de Oposición, EH-Bildu también pedirá explicaciones a Imanol Pradales por el nombramiento de la recién sustituida directora del Medio de EISA, Marta Martín, como directora de Identidad Corporativa del Gobierno de Lakua, que tiene entre sus funciones el reparto de la publicidad institucional entre todos los Medios de Comunicación.

¿Alguien se imagina a un hermano de Florentino Pérez arbitrando un partido del Real Madrid contra el Athletic Club, el Alavés, el Osasuna o La Real Sociedad? Ya sé que es simple pero, para que se nos entienda, no se me ocurre mejor ejemplo.

Algo inequívocamente demandado a los gobernantes es la transparencia, la objetividad y objetivación de los repartos de publicidad institucional para romper con las inercias de gobiernos que emplean ese reparto como un bazar para cubrir sus intereses partidistas y espurios. En opinión de esa formación política, este nombramiento solo hace ahondar en sospechas, en espacios opacos para intereses partidistas, y aumentar la desconfianza y desafección que existe entre la Ciudadanía y la clase política. Y no les falta razón.

Y es que, en verdad, no guardan ni las formas. Que la ex directora de un Medio de Comunicación sea la encargada de cuánto dinero se da a otros Medios….es, cuando menos, vergonzoso. De tal manera, el parlamentario Mujika explica que la ley que regula la actividad de los cargos públicos recoge expresamente que estos “no intervendrán en el conocimiento o decisión de asuntos en los que se afecten a intereses de empresas, sociedades o entidades de cuyos órganos de dirección o de gobierno hayan formado parte en los dos años anteriores al inicio de su relación de servicio, tanto ellos como su cónyuge o pareja de hecho, o sus familiares dentro del segundo grado de afinidad o consanguinidad, o terceras personas con quien tengan intereses compartidos”.

Y, porque es evidente no lleva ni un mes fuera de su cargo en Deia, es del todo procedente la citada iniciativa además de ser, igualmente, procedente pedir explicaciones por el nombramiento y “forzar que la recién nombrada Marta Martín sea apartada de la función, adscrita a su cargo, de dirigir el reparto de la publicidad institucional”.

Esto supone que Marta Martín debería inhibirse en las decisiones más trascendentes de su puesto que, por cierto, es de nueva creación. El Gobierno de Lakua ya disponía de normas de identidad corporativa (que se pueden consultar en su web) y hasta la fecha no se había visto la necesidad de nombrar a una directora para ello, con un sueldo cercano a los 80.000 euros anuales. En la página en la que Irekia recoge los cargos de Lehendakaritza, no figura ni la fotografía ni el currículo de Marta Martín, pero ya les ilustro yo con un par de fotos lo suficientemente descriptivas para ver quiénes son -entre otras y otros- sus mentores (con su defectuosa pituitaria).

Por otro lado, los impulsores de la iniciativa tampoco ven adecuado su nombramiento en base a algunas de sus funciones asignadas, por ser una persona que carece del nivel de euskara suficiente, y al serle asignada la responsabilidad de “definir en el área de su competencia, en coordinación con la Secretaría General de Comunicación e Innovación Social, los objetivos establecidos en el Plan para la normalización del uso del euskera y desarrollar las iniciativas precisas para su implantación y evaluación”.

En resumidas cuentas, en cualquier país “normalito” de Europa, Marta Martín debería tener a estas horas encima de la mesa su carta de cese, caso de no haber presentado previamente su dimisión. Y, al margen del inmediato cese de Marta Martín, también procedería la del asesor o asesora de turno que resultase responsable de proponer o dar el visto bueno a semejante nombramiento y, ello, a sabiendas de que se estaba incumpliendo lo normativamente legislado… Total, por prescindir de asesor en el Gobierno vasco (que tiene más asesores que el Gobierno Británico) no pasa nada. Como ruedas de coches, se cambian las pinchadas y a otra cosa. Ya les buscarán el habitual acomodo giratorio a quiénes salgan por una puerta y entren por otra al tiempo que ya buscarán los recambios, si es que, en verdad, es necesario recambiar a alguien en puestos de nueva creación que, por estrenarse, ni se han estrenado.

Lo que me queda claro es que Marta Martín también concita un “gran consenso” entre sus compañeras y compañeros… Un consenso para denunciarla y poner luz a la gran chapuza de Imanol Pradales e Ibone Bengoetxea que se están luciendo. Seis meses de manoseo  para esto… Vaya ojo clínico ése consistente en premiar como subvencionadora de subvenciones a una subvencionada. Pero ¡oh! ¡maldita suerte! El ojo público descubre y acaba con la impunidad de Ortuzar y Baños. Otra vez... ¿Y van…?

¿No les llama la atención que Marta Martín prefiera ser la Madre Teresa de Calcuta de Cáritas subvencionadoras a ser Directora de Deia?  O poco la pagaban, o vaya vocación periodística la de esta señora que tiene toda la pinta de que fue puesta ahí para cargarse a Deia. No vemos otra explicación factible.

Pero si se queda sin trabajo (que nunca será así aunque tengan que crear la Dirección de Asuntos Espaciales de Lehendakaritza), por un euro la contrato yo para que, también, me arruine el Blog. Ya ven que soy más generoso que ella y, si alguien hace en el Parlamento Vasco el papel de Leixuri Arrizabalaga (en Juntas Generales de Bizkaia, justificando la “sensibilidad por la cultura” de Iñigo Iturrate para dirigir el Palacio Euskalduna), argumentando que Marta Martín tiene “sensibilidad por la publicidad”, además de estar saltándose lo establecido por Ley, volverá a hacer el ridículo. Pero, cono todo, la dejan dónde está, que me dé una subvención porque hay días que tengo más entradas que el Medio que dirigía  y suscito mucho más interés entre los jeltzales y no adscritos a la sigla histórica.  Interés que, por cierto, va creciendo a diario porque ¿Quién denuncia estas corruptelas salvo este Blog? De hecho, mañana mismo, saldremos con datos el affaire sobre Elkarkidetza.

Menos mal que no somos muy viejos porque, si no, Ortuzar casi nos desearía un buen tanatorio como, sin el menor sentido de la vergüenza ni del pudor, hizo con veteranos alderdikides (y burukides) el pasado domingo desde las páginas de El Correo Español.