
Por el momento, lo único que sabemos es que Arriola y Rementeria ganan, Sagredo, pierde
El enfrentamiento entre Antón Arriola y Xabier Sagredo era muy sencillo: Terminado el proceso de fusión de las tres cajas de ahorros vascas, las más politizadas del Estado, con un banco resultante, Kutxabank, ya consolidado, el PNV se propuso nombrar un presidente que diera lustre y esplendor a la entidad.
Los candidatos eran dos. El responsable de la BBK, ya Fundación, es decir, de las antiguas Cajas de Ahorros de Bizkaia y Bilbao, la más grande de la tres, Xavier Sagredo, primo de Ortuzar y de boina calada, y Antón Arriola, que viene de la banca de inversión, esposo de Laura Abasolo, hasta hoy directora financiera de Telefónica.
Pues bien, a Sagredo lo retiran de la batalla, sin explicación alguna, aunque su primo algo le conseguirá. Igual aparece en PwC, ya que le ha dejado la silla caliente, amén de los Consejos en los que le había introducido Andoni. Que la Famiglia es la Famiglia y, si no, vean a su hija tan contestataria de pico y tan burguesa ahora en Iberdrola. ¡Si hasta yo soy Influencer!
Arriola se ha asentado como presidente de Kutxabank y ha optado por capitalizar la sociedad al máximo y dedicarse a la gestión de activos. Ojo, la tres fundaciones siguen siendo vitales, son los propietarios y la fundación BBK es, además, una de las principales carteras industriales del Estado español.
Ahora bien, con el debido respeto, el epitafio de Sagredo tiene cierta coña cuando habla de que ha logrado el equilibrio financiero, un tipo que solo sabe sumar dos más dos.... Hombre, el equilibrio financiero de un accionista se lo da el dividendo de sus empresas participadas. Es decir, la BBK no logra el equilibrio financiero: lo obtiene de Kutxabank. Pero el segundón DEIA le da pábulo sin saber lo que dice Sagreso y sin saber lo que redacta la entrevistadora. Todo "mu profesional" y eso....
Sagredo lo que sabía era ser Consejero de Iberdrola, Tubacex y gran Gurú de Kutxabank. ¿Saben a cuánto en Kutxabank? Pues dicen que al escandaloso y meteórico precio de 217.800 euros al año. Sinceramente, de ser así (y lo será hasta que alguien lo desmienta... que no lo hará) es una puta vergüenza. Algo que debería ser pagado solo con dietas de asistencia a reuniones, le cuesta a las Cajas ese dineral. Es como si el presidente de Cáritas se embolsara semejante dividendo, no arriesgando nada. Y todo gracias a que cambiaron el criterio de un Consejo sin sueldo, a uno tan extraordinariamente pagado a iniciativa de Ortuzar y Aurrekoetxea. Es decir, veinte mil al mes del ala por no pegar un palo al agua + gastos pagados.
BBK se convirtió en Fundación bancaria en 2014 con el 57% del capital e Kutxabank, donde comparten consejo con Vital y Kutxa. La obra social, para eso nacieron las Cajas, no tiene una política propia. Son subvenciones discrecionales. Se acabaron las Colonias de Verano, la enseñanza del euskera, las Colonias Infantiles, sin programas pero con reparto del dinero discrecionalmente. Sagredo se ha dedicado a hacer de su presidencia algo más propio de un Jauntxo que de un servidor público con una ideología social, tomando iniciativas de Juzgado de Guardia como aquella que promovió por interés personal como lo fue el torneo de fútbol que organizó a su medida en 2018.
Nadie, pues, ha llorado su cese (más bien, sonora patada). Y un balance de su gestión debería ser analizado por el propio Partido. Pero ya...
Ahora se abre una nueva etapa. El PNV a través de Unai Rementeria, el chico de los recados de Mundaka que vale para un roto y para un descosido y que ha cambiado de caballo en mitad del río hacia el percherón de la cuadra de Ortuzar-Aurrekoetxea, controla un banco mediano, mientras el banco de Euzkadi sigue siendo el BBVA que, por si no lo recuerdan, significa Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA). Es el sueño de aquel PNV eficaz, ya fenecido, y como se dice en los Batzokis, "nos los quitaron políticamente y políticamente deberíamos recuperarlo". Ya, ya... Que se lo pregunten a Pedro Luis Uriarte, que fue Consejero Delegado y no hizo nada.
Si vamos por el segundo camino, fusionar Kutxabank con BBVA, da para tener un consejero en el resultante y poco más, algo que Ortuzar no le haría asco alguno. Dejó hace tiempo de ser abertzale. Para eso, mejor conseguir que Pedro Sánchez regale el BBVA y mantener aparte, como banco, no de Estado sino de algunos del Partido, Kutxabank.
Por el momento, lo único que sabemos es que Sagredo pierde, Arriola gana, y Rementeria a cobrar y a hacer surf porque lo de trabajar como que no va con él. Además, Unai, el hombre que sustituirá a Sagredo en la Fundación BBK, no supondrá ningún obstáculo para Arriola.
¿Rementeria? El mismo. Le llaman "Unai missing" por su desaparición durante la Covid. Decía que tenía que conciliar con la familia y desaparecía. Y cuando estuvo en Elkarkidetza comentaba que eso no le gustaba nada, mucho trabajo, poco vermut y, encima, tener que aguantar a funcionarios.
Lo suyo va de no cumplir promesas: El túnel de Sollube para la siguiente generación. Pero si la carretera al "hotel con encanto" de su hermano, cómoda y bien asfaltada. Pregunten tomando un pote con los lugareños en el Canon. Y eso que lo ha sido todo: Concejal y Alcalde, burukide del BBB y del EBB, parlamentario Vasco, juntero y Diputado General. Que por currículum no sea. Y algo pasó para que no fuera el Lehendakari. Más guapo y simpático que Pradales ya es. El 52 años y Pradales 50. Pero la guerra de Famiglias hizo el resto. Ahora está reconciliado con Ortuzar y Aurrekoetxea. Hace poco estuvieron Ortuzar, Aurre, Juan Mari Atutxa y otro más jamando en el asador Getaria de Bilbao.
Yo le creía muy de Itxaso Atutxa pero esta señorona termina enfadándose con todo el mundo. La foto de la cabecera es un montaje para recordar que se puso micrófonos debajo de la camisa para sorprender al alcalde de Mundaka. Pero también recuerden que Pradales fue diputado con él. El mismo Pradales al que, ahora, le han hecho Lehendakari. El mismo del del Subfluvial supermillonario, y el mismo que tenía de acciones en Sacyr.
Rementeria está de hoz y coz con Ortúzar y el resultado es que Aitor Esteban, de los nervios, le toma por el pito de un sereno... En Mundaka le llaman el surfista conciliador. Se escapaba de la Dipu para cuidar a los chavales, cogía la tabla y a surfear...
Este grupo es como el de esos drogadictos obsesos del dinero: Adicción que necesita terapia de choque...Y creen que se cura con puestos de relumbrón, poco trabajo, mucha ostentación y sueldos millonarios.
Pobre País... Pobre Partido.
Missing Rementeria. Otro Euskayetano de la escuela de Ortuzar como Pradales, toda la vida viviendo del carnet del partido y así seguirán.
ResponderEliminarPoco esfuerzo y mucho sueldo.
Mientras miles de jóvenes vascos profesionales no podrán volver a Euskadi.